Luego de un proceso que inició
en el 2016 en La Comunidad de La Horqueta a orillas del Arroyo Bruno, lo cual
trazó un sendero para recorrer 14 lugares diferentes del Territorio Wayuu, logró
con una Yonna recibir honores de graduación a 22 jóvenes que durante 2 años se
formaron en el empoderamiento de diferentes herramientas comunicacionales para
ponerlas al servicio de su pueblo.
La Comunidad de Yawaka recibió
alrededor de 200 personas convocadas por las organizaciones que hacen parte de
La Red Pütchimaajana y de esta manera recibir Autoridades Tradicionales, líderes, padres de
familia, hermanos y comunidad en general tanto de Colombia como de Venezuela, para
compartir la sombra de enramadas con delegados de quienes apoyaron este proceso desde el Ministerio de
Comunicaciones, APC Colombia, Cancillería y Unesco, quienes todos unidos presenciaron el acto que trasciende
en positivas opiniones que demarcan un camino que les hace responsables a
narrar el territorio y sus valores culturales desde las cámaras, grabadoras,
computadores y la oralidad que se les inculcó desde un enfoque más humano a lo
largo del recorrido.
La maña lluviosa del 11 de
Noviembre que cubrió Riohacha, Maicao, Uribia y Manaure se interpretó como una
bendición para dejar las huellas firmes sobre la tierra que dan fe de que el
camino que se traza a futuro es prometedor para el proceso que se ha tejido
desde La Red y La Escuela, siendo la Yonna con la que se aperturó el acto, una
muestra de agradecimiento por lo provechoso que ha reflejado ser todo este
andar.
En voz de Mayra Jayaliyu y
Luis Fuenmayor – Comunicadores Indígenas de La Red, se direccionaron cada una
de las actividades que se llevaron a cabo, siendo la presentación de cada grupo
el paso seguido, en el que inicialmente en cabeza de Mileidys Polanco se
presentaron los jóvenes de La Palabra – redacción y Fotografía, seguidos por
Sailyn Fernandez en compañía de los jóvenes de Los Sonidos y Producción Radial,
dejando por último a Leiqui Uliana quien acompañó el grupo de La Imagen y La
Producción Audiovisual.
Entre las presentaciones
jóvenes se destacaron durante sus intervenciones como lo la de Eduvilia Uliana,
joven mujer que con finas y dulces palabras describió su emoción por sentir que
este proceso le aporta a su vida un sueño hecho realidad, así como a Yelver
Flórez una noción para hacer aportes significativos a las comunidades y a Jeiner Camargo
un aliciente para creer en sí mismos con un enfoque que permita defender la
tierra y los valores propios que dan identidad a los wayuu.
Olimpia Palmar, mujer wayuu que
hace parte de la red presidió seguidamente una ronda de palabra muy
representativa en la que entre sabedores, líderes representativos y palabreros,
se dejaron mensajes concretos para el camino que se empieza a visionar, siendo
una propuesta por ejemplo de Remedios Fajardo el establecer estrategias que
permitan promover aún más el idioma wayuunaiki como más firme estrategia de
resistencia, idea complementada en la intervención de Guillermo Ojeda Jayariyu,
quien no solo afianza la importancia del idioma, sino de lo que decimos con
nuestra palabra porque –“con la palabra podemos promover la paz o la guerra,
por eso hay que saber qué hacer con la misma”, siendo esta unión de reflexiones
un mensaje que generó acertada aceptación e ideas para desarrollar.
La sorpresiva visita del
Gobernador (e) del Departamento de La Guajira – Weilder Guerra Curvelo, dejó
como mensaje la importancia de formar comunicadores propios y la necesidad de
generar espacios desde instancias departamentales que les permita el desarrollo
de estrategias que hagan visibles aquellas historias que nacen del seno de La
Comunidad, para lo cual dio su palabra en 2 acciones concretas, apoyar parte del
equipo de La Red y La Escuela que próximamente asistirán a un evento de Cine Indígena en
Bagotá, así como también dar prioridad en los planes que se ejecutaran el año
entrante.
Como un reflejo del buen
trabajo desempeñado, Mileidys Polanco, actual Directora Departamental de
Cultura Juventud y Género invitó a una nueva ronda de palabra en la que
Argemiro Cortés – Director de Comunicaciones del Ministerio de Cultura se le
realzó su incondicional apoyo, considerándosele por este gesto ser “El Tío de
La Escuela” - y en calidad de Tío resaltó que el éxito de este proceso ha sido
la constancia y las buenas ideas, por lo cual felicitó cada paso plasmado, integrándose
a este planteamiento voces como la de Soraya Bayuelo de Los Montes de María y
Silsa Arias de La ONIC, quienes resaltaron la importante labor de formar comunicadores
al servicio de la construcción de Paz en los territorios.
Un emotivo momento se guardó
casi para el final en el que La Red de Comunicaciones del Pueblo Wayuu
homenajeó a una hermana que vio nacer el proceso como uno de sus sueños. En voz de Nat Nat Iguarán, Mermis Fernández y Sailyn Fernández se dio paso a uno de los actos centrales como lo fué el denominar el camino que sigue de aquí en adelante como
Escuela de Comunicaciones del Pueblo Wayuu – Jayariyu Farías Montiel, valiéndose
del importante legado comunicacional que esta valerosa mujer dejó en millares
de letras para narrar el territorio que amó siempre.
Aprovechando el emblemático
momento se creó el Premio por La Motivación a las letras que narran el
territorio, el cual fue entregado a Eduvilia Uliana por su dedicación y
constancia en el encarnar el espíritu propuesto por La Escuela en el marco de
su proceso formativo al interior del grupo de La Palabra, la escritura y la
fotografía, ante lo cual la joven en medio de lagrimas expresó: -“No aguanto la
emoción y es esta una razón más para continuar adelante con cada una de las
enseñanzas que este camino me ha dejado”, agradeciendo además el ser entregado en presencia y mano de La Señora Dulcynea Montiel, madre de Jayariyu.
La Abuela Pachishi que en
medio de todo el escenario estuvo presente todo el tiempo y acompañada de 22
pachishi de menos tamaño, repartió en cada una de ellas y en manos de los
graduandos, un puñado de tierra que recogió de cada uno de los lugares
visitados, simbolizando asi la unidad que rompe la frontera impuesta por los
estados y ante lo cual las comunicaciones busca jugar un rol fundamental que
dinamice la hermandad y de procesos que deben ser direccionados a visibilizar
lo que somos como pueblo.
En el recibir finalmente los
diplomas y los sombreros que acompañaran sus pensamientos desde las montañas,
los ríos, las lagunas, los desiertos y mares del Territorio Wayuu, se dio un
brindis final en el que el mensaje final radica en que a partir del año
entrante y luego de 2 ciclos formativos llevados a cabo, hay un semillero
formativo listo a contar lo que no se cuenta, a investigar lo que hace falta, a
dejar de lado lo urgente y dedicarse a lo importante, en el que se hace valer
la palabra y el espíritu por defender la madre tierra la escencia con la que se
trabajará de aquí en adelante.
Una nueva pachishi recibió la
arena de Yawaka, por ende los caminos están abiertos para este proceso.