viernes, 4 de julio de 2025

 Voces de Resistencia en el Resguardo Indígena Provincial 




Texto: Ernestor Fernández

Fotografía: César Palmar   

Al sur del Departamento de La Guajira, en el Municipio de Barrancas, en la zona rural de su jurisdicción, se encuentra ubicado el resguardo indígena wayuu Provincial, constituido desde hace 37 años con una extensión 495 hectáreas, allí habitan 222 familias donde predominan los eirukuu woliyuu y uliana, funcionan bajo un modelo de gobierno regido por un cabildo gobernador indígena wayuu, su vecino más notorio es el Cerrejón, una multinacional que opera desde hace 41 años.

El lugar es habitado por un total de 1017 personas, entre niños, niñas, adultos y personas de la tercera edad, pero al principio, solo llegaron 5 persona a trabajar con un finquero llamado Chema Hernández, quien les permitió construir sus casas y así poder traer sus familias. Según Olga Wouliyu, autoridad tradicional de Provincial, explicó que originalmente estaban asentados en Alta Guajira, “Somos de Wuinpumuin la cuna de los eirukuu, mis abuelos llegaron a este lugar a mediados del año 1940 en busca de trabajo, alimentos para sus animales, cuando llegaron al territorio esta deshabitada era una tierra fértil con árboles frutales, animales exóticos, que con el tiempo fueron desapareciendo por los cambios climáticos y la explotación minera, pero hemos resistido gracias a la unidad y los acuerdos de los mayores”. 

A pesar de tantas necesidades que han sufrido las comunidades, sigue en pie de lucha constituyéndose  como resguardo indígena,  Oscar wouliyu el primer Cabildo Gobernador en durar 15 años  expreso, “Cuando comenzó la organización de las autoridades yo era un niño solo los veía las reuniones que hacia mis padres, aun así estuve presente organizando los linderos con mi hermano,   hasta que esa lucha dio fruto con la aprobación de la Resolución 085 del 26 de septiembre de 1988, por eso me consideró fundador con mis padres”, él se refiere a la constitución del resguardo indígena Provincial Barrancas, con una extensión de 447, 64 hectáreas según información de Corpoguajira, esta resolución fue emitida por INCORA (Instituto Colombiano de la Reforma Agraria).

 Por otro lado, hubo un movimiento en defensa de los derechos en salud, educación, vivienda y entre otros ámbitos, como resultado obtuvieron la sentencia T-614 de 2019, un fallo de la Corte Constitucional de Colombia que protege los derechos fundamentales a la salud y al ambiente sano de los habitantes del resguardo. A partir de esa sentencia, adquirieron proyectos como viveros forestales, artesanía, cría de ganados, lavado de viviendas, construcción de un centro de salud, un mega colegio que beneficia a 120 alumnos aproximadamente de prescolar a sexto grado y una placa huella internas con una longitud de 3.4 kilometro y 5.20 metros de anchos que busca facilitar el acceso y la movilidad de los habitantes del resguardo.

Asimismo, este resguardo cuenta con un lineamiento político organizativo liderado por un cabildo gobernador y 16 autoridades administrativos, Marcos Britos, es quien ejerce esa función, es el encargado de formular, gestionar recursos y ejecutar proyecto para la comunidad,  “poseemos una certificación desde el ministerio del interior, y las autoridades son el consejo con quien  toman  las daciones y así de la mano con ellos trabajamos en pro de la sociedad y por eso tenemos nuestro reglamento interno porque somos los resguardo más organizada en cuanto a la estructura socio política ”. 

La historia de Marcos.

  En cuanto a Marcos Brito, del eirukuu wouliyuu, su historia para formarse como líder se remonta al 2017 cuando hizo parte la segunda promoción de la Escuela de Comunicación del pueblo “wayuu Jayariyu Farias Montiel”, desde esa experiencia logro hacer tres documentales que son la” Lucha de Luz Angela”, “Seños Enterrados” y “Lamentos Exigencias”,   “En la historia de Provincial yo soy el cabildo mas joven de 28 años, empecé mi liderazgo desde 2018 junto con mi hermano a recorrer  el territorio y la Escuela de Comunicación wayuu para mi fue un plus por ahí fortalecí mi lengua materna porque uno en este espacio siempre hay que hablar en wayunaiki” expreso  Brito.

En conclusión, la lucha del resguardo provincial es un llamado a la acción para que las autoridades y la sociedad en general tomen conciencia de la importancia en proteger los derechos de las comunidades indígenas y de garantizar que sea justo y sostenible para todos y es un esfuerzo colectivo que requiere la participacion y el compromiso universal, y marca un hito en la historia del Departamento de la Guajira Colombia.  






 Resguardo indígena provincial exige un futuro sostenible y limpio


Texto: Francheska Gómez 

Fotografía: Cindy Bouriyu

En el sur de la Guajira municipio de Barrancas se encuentra ubicado el Resguardo indígena Provincial, un territorio que ha sido testigo de múltiples iniciativas, entre las que se destaca el proyecto de lavado de viviendas, surgido a raíz de una lucha comunitaria que se remonta a la sentencia T-614 de 2019. Esta decisión legal fue el resultado del esfuerzo incansable de dos mujeres valientes, Yasmina Uriana y Mari Luz Uriana, quienes emprendieron su lucha ante el estruendo de las maquinas en defensa del territorio y el medio ambiente. Su resistencia durante aproximadamente dos años sentó las bases para un cambio significativo en el resguardo.

Según Deimer Ortiz, ingeniero ambiental y miembro del Resguardo Indígena Provincial, la sentencia trajo consigo 12 órdenes específicas que debían cumplirse en el territorio, una de estas órdenes fue el lavado de casas en Provincial, que abarcó no solo las viviendas, sino también las áreas circundantes y los colegios. 

En un censo realizado posteriormente, se identificaron alrededor de 200 casa beneficiarios que dieron inicio al proyecto en 2021, desde entonces, se han llevado a cabo actividades anuales para garantizar la limpieza y conservación del entorno habitacional.

El proceso del lavado 

El lavado involucra un equipo de personas contratado que se encarga de limpiar tanto el interior como el exterior de las casas estas tareas incluyen la limpieza de paredes, ventanas y techos, así como la atención a la vegetación, crucial para mantener un ambiente saludable un esfuerzo que no solo busca embellecer las viviendas, sino también contribuir al bienestar físico y mental de los residentes.

La nómina de empleados está conformada por 24 personas, entre hombres y mujeres, quienes utilizan herramientas como cepillos y detergentes para realizar su trabajo, un equipo de trabajadores que se dividen en cuadrillas y un líder responsable que coordina las actividades.

Ailin Acosta Pushaina, líder de la comunidad destaca que cada año se actualiza la georreferenciación de las viviendas para garantizar una atención adecuada a los beneficiarios, “si de pronto hizo su casa en otro sector, en el año siguiente va actualizando sus datos mediante un formato de satisfacción en dónde el beneficiario puede firmar un formato” así lo explicó.

Impacto en la comunidad 

El acuerdo original con Cerrejón estipulaba que el proyecto duraría cinco años, este año marca su finalización, sin embargo, se espera que continúe bajo la supervisión del cabildo gobernante debido a su evidente impacto positivo en toda la comunidad, además del lavado de casas, el proyecto incluyó la limpieza de jagüeyes, reservorios vitales para el suministro de agua en los ocho sectores del Resguardo Provincial.

A pesar del éxito del proyecto, algunos residentes han expresado sus inquietudes, Dani Acosta Uriana, del Sector Cardonalito, comenta que el lavado anual es beneficioso, sería ideal realizarlo trimestral o semestralmente debido a la acumulación constante del polvo en época de verano, “Agradezco lo que se ha hecho hasta ahora, pero creo que una mayor frecuencia sería más efectiva”, señala.

Beneficio del proyecto 

Desde su implementación alrededor de 200 familia han recibido este beneficio, Maira Alejandra Quintero Brito resalta como este proyecto ha mejorado su calidad de vida: “Antes no tenía cómo limpiar mi techo adecuadamente; ahora contamos con un equipo capacitado que hace un trabajo excelente”. Menciona también cómo esta iniciativa ha fomentado hábitos responsables sobre la recolección de residuos entre los habitantes.

El proyecto de lavado de viviendas en el Resguardo Provincial es un ejemplo claro de la lucha de las comunidades en la búsqueda de la reivindicación de sus derechos y el cuidado ambiental a través del esfuerzo conjunto y la valentía individual, los habitantes han logrado transformar su entorno y mejorar su calidad de vida.



En el Resguardo Provincial, las luchas indígenas es sinonimo de progreso


“Restableciendo los derechos de las comunidades a traves de acuerdos y dialogos colectivos”

Fotografia: César Palmar

Texto: Dilmaris Fernández


La identidad propia de las comunidades indígenas en La Guajira está ligada a su vasta extensión de tierra. Si bien se ha discutido ampliamente sobre los desafíos derivados de la explotación del carbón en este territorio, y se han documentado sus afectaciones, es menos común escuchar sobre los proyectos implementados para la reivindicación y el restablecimiento de los derechos de las comunidades. Un claro ejemplo de esto se observa en el Resguardo Indígena Provincial del municipio de Barrancas.

El Resguardo Provincial fue fundado el 26 de septiembre de 1988, que actualmente está frente a la mina de carbón Cerrejón. Se ubica específicamente en la cuenca del río Ranchería, al suroeste, y las operaciones mineras también abarcan los municipios de Albania, Hato Nuevo, Maicao y Uribia.

El proceso de lucha en Provincial surgió a raíz de la acción de una de sus habitantes, Luz Ángela Uriana. Ella emprendió una batalla legal debido a la enfermedad de su hijo, quien sufría de asma, y afirmó que la causa era respirar aire contaminado. Esta afirmación se respaldó en una acción de tutela que interpuso ante la Corte Constitucional, en ese momento, el Resguardo se encontraba dividido, pero gracias al apoyo de una de las facciones, se logró un fallo a su favor. Esta tutela se transformó posteriormente en la sentencia T-614 del 2019, que busca proteger el derecho a un ambiente sano para los asentamientos del Resguardo Wayúu.

Según el mencionado fallo, “el Estado tiene la responsabilidad de establecer directrices y ordenar la restauración de todos los impactos negativos generados por actividades extractivas. Por ello, le corresponde la obligación de preservar la vida, la integridad física, la salud y la cultura de los habitantes del territorio colombiano. En esta sentencia se aplica el principio de precaución, que implica tomar medidas para evitar daños graves y permanentes en el medio ambiente y en la salud de las comunidades”.

En entrevista concedida a la Escuela de Comunicaciones Wayuu, el cabildo Gobernador Marcos Brito afirmó en referencia al proceso que lidera que “la lucha no es solamente decir voy a hacer una propuesta, es realizar la propuesta desde los argumentos, la experiencia y las vivencias propias que se han tenido".

El trabajo colectivo siempre ha existido en Provincial, “Aunque el Resguardo, en sus inicios, no pertenecía al pueblo wayuu, sino que era propiedad privada que en algún momento fueron fincas de producción, con el tiempo los ancianos wayuu se asentaron en este territorio atraídos por la riqueza de la tierra y el agua.

Los diálogos entre el Resguardo Indígena y Cerrejón comenzaron con el fin de establecer mecanismos que aseguren el cumplimiento de dicha sentencia. “En el marco del buen relacionamiento se dio inicio a uno de los proyectos de reforestación que de alguna manera compensan el impacto en la comunidad”, explicó Brito.

Entre las acciones que resaltan los diálogos colectivos de los acuerdos que impulsan la comunidad se dio la construcción y dotación de un centro de salud, la rehabilitación ambiental, la creación de un vivero que produce actualmente 100.000 plantas anuales que contribuyen a la reforestación.

Igualmente se llevan a cabo los proyectos de artesanía que contribuye a la sostenibilidad, la ejecución de proyectos productivos y el apoyo de mejoras en el servicio de salud. Cabe destacar que los protagonistas de cada uno de estos procesos y estos avances significativos son los miembros de la misma comunidad.

Con esto se da una visión colectiva de como a través del liderazgo y movimientos indígenas se han avanzado en los diálogos que se evidencian los proyectos productivos que benefician a familias en el Resguardo de Provincial.









 

El grito silencioso de las mujeres artesanas wayuu

 El grito silencioso de las mujeres artesanas wayuu

Texto: Dilexi Dayana Pushaina Epinayu 

Escuela de Comunicación del pueblo wayuu “Jayariyú Farías Montiel” 




En los últimos años la artesanía wayuu ha ganado gran relevancia en ferias, pasarelas y mercados internacionales, sin embargo, tras este reconocimiento creciente, se ocultan desafíos profundos como el desconocimiento de la realidad que enfrentan las artesanas que las elaboran, además, las nuevas generaciones expuestas a la globalización y el desarraigo cultural, están perdiendo la conexión con los saberes ancestrales del tejido, lo que pone en riesgo la continuidad de este patrimonio material.

La artesanía es una de las expresiones culturales más representativas del pueblo wayuu, entre las piezas más conocidas se encuentran la elaboración de mochilas, chinchorros, manillas, guaireñas y sombreros. Cada uno con diseños geométricos que narran historias, vivencias, visiones del mundo y enseñanzas heredadas por generaciones dentro de la sociedad wayuu.

En Colombia existen entidades que promueven la artesanía dentro de los territorios indígenas, una de ellas es Artesanías de Colombia, capacita a los miembros de las comunidades en diseños sin perder la identidad cultural, certificación de calidad, participación en ferias como Expoartesanias y Expoartesano, lo cual ha generado una mejoría en la comercialización y visibilidad nacional e internacional. 

Estos procesos de formación han sido pilares fundamentales para las comunidades indígenas para promover la economía para las familias wayuu en el desarrollo de proyectos en las comunidades tal como es el caso del Resguardo Provincial del Municipio de Barrancas La Guajira.

Emprendimiento en Territorio

Ailín Acosta Pushaina y Maira Alejandra Quintero representan a las mujeres wayuu que buscan el desarrollo económico de los  miembros de esta zona del sur de Guajira, cada una lideran un grupo de personas a través de una Asociación.

Kanasü ha sido uno de las alianzas de los miembros del sector Cardenalito, con una trayectoria de más de diez años de constitución y ha sido un espacio de taller artesanal, desde este colectivo conformado por 24 personas, entre mujeres y hombres, quienes han mantenido viva la tradición ancestral a través de la elaboración de artesanias, todos ellos liderados  por Ailín Acosta Pushaina.

Las mujeres son las encargadas de la gran mayoría de los productos y los hombres principalmente de la elaboración de gazas y manillas, Danis Acosta una artesana miembro del colectivo expresa que esta asociación ha sido un mecanismo positivo en parte económica para el sector, “gracias a este proyecto se ha tenido en cuenta nuestras artesanías en ferias, lo cual ha sido buen ingreso para nuestros hogares”

A través de la participación de Acosta se ha tenido convenios con diferentes entidades como Artesanías Colombia, Cisal y el Sena  los cual han sido un puente para la comercialización de los productos a través de diferentes ferias a ciudades como Bogotá y Medellín, así también espacios al exterior del país principalmente en Dubái.

Variedad Artesanal y accesibilidad 

La Asociación Kanasü ha desarrollado un modelo productivo que abarca distintas líneas artesanales, permitiendo ofrecer una amplia gama de productos adaptados a diferentes gustos y presupuestos. Entre sus piezas más destacadas las mochilas tradicionales disponibles en varios tamaños, las pequeñas tiene un valor aproximado de 120.000 pesos; las medianas con valor de 260.000 pesos; y las grandes alcanzan los 360.000 pesos dependiendo del diseño y complejidad del tejido.

Otra línea importante es la de manillas una de las más accesibles con precios que van desde 5.000 a 15.000 pesos por unidad. Por compras al mayor los precios son de 1.000 o 2.000 por manillas dependiendo de la cantidad.

En cuanto a los tradicionales chinchorros varían Según la técnica empleada que va desde los 800.000 y puede tener un alcance de 4.000.000 de pesos 

En noviembre del 2021 Kanasü tuvo una importante participación en un taller de demostración de oficio en la ciudad de Dubái, gracias a una invitación de Artesanías de Colombia, este espacio no solo permitió visibilizar el saber ancestral del tejido wayuu, si no también llevar productos  representativos de la comunidad, se logró  realizar una venta alrededor  de  7 millones de pesos Colombianos, lo cual reafirma el potencial comercial y cultural de estas piezas en el mercado global.

Gestión de maquinarias 

Por otra parte la Asociación Desarrollo y Paz de la Guajira ASODEPAZ liderada por María Alejandra Quintero, gracias a Fondo Mujer hoy en día cuenta con cuatro maquinas que fueron donadas en el año 2024 por la vicepresidenta Francia Marques, las mujeres miembros de este proyecto cuentan con una maquina fileteadora, un plotter de impresión y una maquina bordadora.

ASODEPAZ cuenta con una Infraestructura gracias al apoyo de asociados que reunieron materiales para tener donde realizar sus artesanías. 

Gracias a estas herramientas los miembros de este colectivo del resguardo Tinajita realizan la elaboración de mantas, tanto como en los bordados, estampados y otras técnicas 

La línea de mantas varían del diseño, por lo menos las mantas tipo bata tiene un aproximado de 30.000$ y las de innovación con un valor desde 85.000 pesos dependiendo del tipo de tela y los apliques de cada manta.    

El tejido, más allá de ser una práctica ancestral, se ha convertido en una herramienta poderosa de liderazgo y empoderamiento para las mujeres Wayuu. A través de cada hebra, no solo se preserva la memoria colectiva del pueblo, sino que también se tejen caminos a la economía propia, resistencia y transformación social. Mujeres como Ailin Acosta y Maira Quintero entre muchas otras lideresas han transformado a lo que antes se había visto como un oficio domestico en una fuente de autonomía, el arte de tejer es también el arte de levantar la voz, organizar comunidades y abrir espacios en los que la identidad cultural y los derechos de las mujeres se entrelazan con fuerza. Hoy, el tejido no solo cuenta historias del pasado, sino que proyecta un futuro donde las mujeres Wayuu siguen siendo protagonistas de su propio destino.


Resguardo Provincial, un modelo propio de gobernanza intercultural

 Resguardo Provincial, un modelo propio de gobernanza intercultural 


Texto y fotografía: Dayana Cuello Camargo, Wayuu Epieyuu

“El Resguardo visibiliza la adopción política propia en la adaptabilidad de los cambios sociales sin perder la esencia del wayuuwa”  

Resistencia cultural y adaptabilidad ante la sociedad occidental son mecanismos implementados por el Resguardo Indígena Provincial,  para defender sus derechos ante un sistema discriminatorio, ¿cómo lo han logrado? integrando aspectos jurídicos- occidentales y su metodologías propias, cuyo resultado fue la creación de un modelo de gobernanza propio.  

El Resguardo indígena Provincial, ubicado en el  municipio de Barrancas del Departamento de la Guajira, según se lee en su reglamento interno “Kojütirrawa Wanüiki” (El valor de la palabra) abarca 447 hectáreas aproximadamente, con una población de 293 familias y 1.017 habitantes con la existencia de dos clanes o Eiruku: Wouliyuu y Uriana,  compuesto por 8 comunidades llamadas Atachon, Tinajita, Provincial, Cardonalito, Cerrito 1, Cerrito 2, Meruinmana Y Sitio Nuevo. 

En sus orígenes, este territorio estaba conformado por fincas. Fueron los ancestros de los actuales habitantes quienes llegaron huyendo de la sequía en la Alta Guajira, que causaba la muerte de sus animales. Atraídos por la cercanía de un río limpio y saludable, se asentaron en esta zona hacia el año 1940, gracias al señor José María Hernández, quien facilitó su establecimiento.

 En 1984, el Instituto Colombiano de la Reforma Agraria mediante la organización indígena Yanama, se acerca a informar la importancia del reconocimiento de sus derechos ante las empresas explotadoras del Carbón puesto que el territorio es rico en este recurso natural, esto se dio a través de un taller de asesoramiento para un liderazgo sociopolítico que resultó en la creación de la resolución Nº 85 del 26 de septiembre de 1988.   

Oscar Guariyu,  ex-cabildo del resguardo, menciona, “acá no había nada, solo existían nuestras casas en Provincial, fue mi papá quien habló con los arijuna para la creación de nuestro resguardo, yo veía de pequeño las  reuniones de ese proceso”, recordó.

Inicios del resguardo

Con el pasar de los años, decidieron optar por guiarse del modelo político occidental, es decir, a través del voto popular. Ailin  Acosta lideresa y habitante del resguardo manifiesta, “eso era fuerte, las votaciones eran públicas, colocaban los nombres de los candidatos y ya toda la comunidad sabía por quién se votaba “. 

“A partir del 2020, se hicieron ajustes con el fin del progreso comunitario y conservar sus tradiciones culturales, por lo que se llegó al acuerdo de  2 autoridades administrativas, con un total de 16 en el resguardo, quienes apoyan al representante legal” expresó el actual cabildo, Marcos Brito.

El resguardo Provincial con su reglamento aprobado por la defensoría del pueblo y Ministerio del Interior en el Art 49. estipula la elección del gobernado (a) de cabildo será rotada por los sectores, este tendrá un periodo de 1 año, siempre que cumpla las cualidades y calidad para el bienestar del territorio.

Del mismo modo, este reglamento mantiene un equilibrio cultural, con el objetivo de velar y defender  sus derechos, ya que el representante legal debe tener conocimientos jurídicos para la socialización con entes del gobierno y del estado, y a su vez, preservar las tradiciones culturales de manera interna, lo cual ha sido un gran avance y reto en este sistema político interno. 

Este balance se mantiene a través de la resolución de conflictos y aprobación de proyectos entre el cabildo y las autoridades administrativas a través del dialogo y el valor de la palabra reflejando la unión del  territorio, evidenciado en cada proyecto inversiones en educación, salud, vivienda, artesanías y su recuperación ambiental. 

Esta adopción política propia demuestra la resiliencia, resistencia y empoderamiento, por la adaptabilidad de los cambios sociales y estatutarios     sin perder la esencia del wayuuwa al pasar del contacto occidental,  siendo reconocidas por su unidad por parte de resguardos aledaños, entidades gubernamentales como la Defensoría Del Pueblo, Ministerio Del Interior y demás empresas como Corpoguajra, posicionándose como un modelo de organización política a seguir.