Por, Fabio Arpushana
De manera simultánea y bajo el característico sol uribiero, en el Centro Cultural y en el Polideportivo
Aipiamana se llevaron a cabo las competencias y concursos de Juegos Tradicionales
Wayuu, en las que participaron todas las categorías, resaltando, que en esta
oportunidad el festival empezó a incluir la categoría preinfantil e infantil,
representado ser un estimulo para la niñez wayuu, sobre quienes se emprende un
trabajo para fortalecer valores culturales desde la primera infancia.
Los concursantes provenientes
de diferentes lugares del Territorio Wayuu, comentan mientras ven los demás participantes, el tiempo que invierten practicando en sus rancherías para poder
asistir a este magno evento en el que el “Achimpaja”(tiro con flecha), fijó en
el horizonte el inicio de las diferentes disciplinas practicadas, para la cual
además solo uno logro ganar el primer puesto Eduvaldo Aapushana Proveniente de
Uribia, para el “janaya” (lanzamiento de piedra) el ganador fue Laureano Gómez,
para el ”choocho” (trompo wayuu) Rafael
Nieves desde la categoría de mayores, dio ejemplo a las juventudes asistentes,
anexando ademas una frase que comenta mientras sonríe de alegría: - “este Choocho lo hice yo mismo y donde haya
competencias lo pondré a bailar.
Joaquin Prince, reconocido
gestor cultural, es el encargado de estas actividades quien en medio de
compartir sus palabras comentó: - “Toda la vida siempre jugaremos nuestros
deportes y por ende lo hacemos porque conocemos nuestra cultura, ante lo cual, si
bien el alijuna no sabe como es nuestro juego, aquí lo puede conocer, por eso
lo practicamos a nivel recreativo y competitivo, porque ademas de divertirnos, nos
hace concientes de la importancia de valorar nuestra cultura para el futuro”.
El Coloso de Aipiamana, como
se le conoce al escenario donde se desarrollaron estas actividades, calentó sus
arenas y sus vientos para recibir todo la energía de centenares de hermanos
wayuu que disfrutn y esperan siempre esta época de festival porque disfrutan
del encuentro con amistades de todas partes del Territorio Wayuu, siendo esta
una muestra más de la necesidad de seguir luchando por mantener vivo el
Festival Wayuu.
